Proceso artístico y pedagógico para fomentar el acercamiento positivo entre personas con distintas capacidades:¡Descubrimos el punto!
ELE: Equipo La Escuela es el resultado de un proyecto pedagógico-artístico que desde 1992 se viene desarrollando en el taller del Centro de Atención, Rehabilitación y Educación Especial LA ESCUELA de Argomilla de Cayón (Cantabria).
En La Escuela se realizan actividades orientadas a desarrollar capacidades que favorezcan la normalización social y cultural, para que personas con discapacidad, problemas de comunicación, aprendizaje, socialización y/o riesgo de exclusión social encuentren el lugar que, por derecho, les corresponde en esta laberíntica sociedad.
Autoestima, conocimiento, imaginación y trabajo en equipo son los pilares en los que se fundamenta el proyecto pedagógico.
Desde sus inicios se consideró esencial realizar experiencias plásticas para estimular el potencial creativo que todos poseemos, experiencias que de una manera transversal facilitan la adquisición de habilidades cognitivas y sociales necesarias para establecer vínculos sociales positivos, ayudando así a un adecuado desarrollo personal.
Esta inquietud es la que nos llevó a descubrir en el cartón, las pinturas de colores y el círculo como único modelo de expresión plástica, los componentes necesarios para crear PUNTOS. Este círculo de cartón, cuando alguien lo llena de color, se transforma en un PUNTO.
¡Descubrimos el punto!
De esta manera el PUNTO se convirtió poco a poco en el eje alrededor del cual se apoya todo nuestro proceso pedagógico–artístico, adquiriendo personalidad propia.
El PUNTO, como lenguaje artístico, expresa así la esencia de cada uno; es el reflejo de su autor que, de forma generosa, se desprende de él para enriquecerse con los de sus compañeros, siendo así un acto de generosidad colectiva, puesto que el autor que los pinta es consciente de su finalidad: su PUNTO se unirá a otros para crear una obra común de la que todos serán autores. Esta unión es la que hace que los PUNTOS alcancen su máximo sentido.
Es toda una labor de equipo; una puesta en común de capacidades distintas, pero con idénticos entusiasmos.
ELE Equipo La Escuela”, amparado por la Asociación sin ánimo de lucro La Escuela de Argomilla, comenzó hace tiempo a impulsar actividades plásticas con el PUNTO como protagonista, con el fin de fomentar el acercamiento positivo entre personas con distintas capacidades. Así hemos ido desarrollando, y continuamos en la labor, todo un abanico de proyectos con la ilusión de poder compartirlos con los demás: jornadas culturales, exposiciones individuales y colectivas, colaboraciones con artistas de reconocido prestigio, proyectos artísticos participativos de gran envergadura, etc. Cada proyecto artístico de ELE busca una doble función: colaborar en el entramado cultural de nuestra sociedad y el ya comentado acercamiento positivo entre personas.
Descubrir el PUNTO fue tan gratificante que, al cabo de los años, seguimos encontrando nuevos recursos plásticos. Tan sencillo y grato para cualquier persona que no requiere ningún conocimiento previo ni habilidad especial para llenarlos de color.
Los integrantes de ELE aportan, en la medida de sus posibilidades, el trabajo y la ilusión suficiente como para que vaya creciendo en colorido por dentro y por fuera.
Han pintado PUNTOS desde niños de muy corta edad hasta alumnos universitarios de Bellas Artes, personas mayores, familias, colectivos de muy diferente índole, algunos de ellos con una marcada vulnerabilidad social, etc. Colectivos que han visto en los PUNTOS una vía muy positiva para restablecer vínculos sociales perdidos, como es el caso del proyecto PINTA&PUNTO realizado con la Asoc. de Familiares y Amigos de Enfermos Mentales Fonte da Virxe, de Santiago de Compostela.
Otros sirvieron para colaborar con movimientos por la paz en países con graves problemas de violencia social, PUNTOS EN PAZ acercaron sectores sociales enfrentados durante años en El Salvador.
Festivales de arte como el FACYL (Festival de las Artes de Castilla y León) dieron cabida a los PUNTOS en un edificio tan emblemático como la Casa de las Conchas en Salamanca.
El Castillo de Argüeso acogió una gran variedad de instalaciones con obras realizadas en el taller de LA ESCUELA.
Una pequeña muestra de la versatilidad de los PUNTOS, tan amplia que todavía el cartón, la pintura y el círculo no han encontrado límites de actuación.
La propia actividad creativa en torno al PUNTO es tan absorbente que nos hace olvidar prejuicios sobre la condición de ciertas personas o grupos sociales. Un acercamiento positivo que consideramos fundamental para ir erosionando barreras y estigmas sociales.
Hace sentirnos integrantes de pleno derecho de la comunidad a la que pertenecemos, aceptando sin ningún escrúpulo la condición del otro, a la vez que se logran resultados artísticos de gran impacto visual.
Al cabo de los años, aprendiendo de cada uno de los proyectos realizados, se ha ido conformando una filosofía en torno al PUNTO que transciende a lo puramente artístico. filosofía que nos habla de socialización, respeto, colaboración, acercamiento positivo, de muchas cosas buenas con las que poder compartir con los demás, de ser con los demás. Un “canto a la convivencia”.
Llegados a este punto de la cuestión, vemos al PUNTO revestido simbólicamente como elemento fundamental y básico de nuestro universo social en el que todos estamos inmersos, elemento que proyecta luz y color en nuestras vidas, cuyo desarrollo y efusión en el espacio de cada exposición quiere representar un canto a la convivencia, como un foco de luz sobre el magnífico entramado social del mundo en que vivimos. [Fernando Zamanillo]